|
|
Colados en Casa Blanca llegaron
a estrechar la mano de Obama

Los infiltrados junto al Vice-Presidente
Joe Biden
Washington DC. 27 de noviembre del 2009. Por Esta vez, la foto es la
nota. Después que el Servicio Secreto insistió que el presidente Barack
Obama nunca estuvo en peligro a raíz de una falla de seguridad que
permitió a una pareja no invitada asistir a su primera cena de estado,
la Casa Blanca difundió una foto en la cual se ve a esas personas
estrechando la mano del presidente y hablando con él.
Mientras la Casa Blanca revelaba que Michaele y Tareq Salahi conocieron
a Obama en la cola de bienvenida, el Servicio Secreto, "profundamente
preocupado y avergonzado", reconocía que sus agentes no verificaron si
aquéllos figuraban en la lista de invitados antes de hacerlos pasar a la
mansión presidencial.
La Casa Blanca divulgó el viernes por la noche una foto que muestra a
Michaele y Tareq Salahi en el Salón Azul, en momentos en que ella saluda
al presidente, al lado del primer ministro indio Manmohan Singh, el
homenajeado en la ocasión. Obama y Michaele sonríen mientras ella le
estrecha la mano con las suyas y su esposo observa. Singh está parado a
la izquierda de Obama.
El Servicio Secreto había dicho esta semana que el presidente no corrió
peligro porque todos los invitados habían pasado por detectores de
metales. Sin embargo, al quedar demostrado lo cerca que estuvieron del
mandatario, no hizo declaraciones al respecto.
La pareja no estaba en la lista de invitados a la cena para el primer
ministro indio Manmohan Singh y no debería haber ingresado, dijo el
director del servicio Mark Sullivan en un comunicado.
"Mientras continúa nuestra investigación, se han tomado las medidas
apropiadas para asegurar que esto no se repita", dijo.
El vocero del Servicio Secreto Jim Mackin dijo que los agentes en un
puesto de control tenían una lista de invitados. Aunque los Salahi no
estaban allí, les permitieron ingresar.
Más temprano, Mackin había dicho que el servicio podría realizar una
investigación penal sobre la pareja. Lo que ocurrió en el sistema de
seguridad podría determinar si se trata de un crimen o sólo de un
episodio vergonzoso.
Según la ley federal es un delito emitir declaraciones falsas
intencionalmente sobre asuntos que corresponden a la jurisdicción
gubernamental.
Nadie niega que la pareja, candidata a un programa de "telerrealidad",
pudo pasar por las barreras de seguridad y el servicio secreto reconoce
que sus procedimientos no fueron seguidos como es debido. Pero a pesar
de esto, no está claro si ambos mintieron a las autoridades y de haberlo
hecho, tampoco está claro si violaron la ley federal.
"A medida que esto se aproxima más a una investigación penal, hay menos
cosas que podemos decir", dijo Mackin. "No quiero poner en riesgo lo que
podría resultar ser una investigación penal. No estamos descartando
ninguna opción en este momento".
El abogado de la pareja, Paul Gardner, publicó un comentario en su
página de Facebook en el que decía: "Mis clientes obtuvieron la
aprobación de la Casa Blanca para estar ahí". El abogado agregó que no
habrá otras declaraciones.
Fuente: © 2009 El Nuevo Herald.
Por Larry Margasak
|
|